Cambios cerebrales positivos.
Los ejercicios aeróbicos de bajo impacto, como caminar, previenen la demencia temprana, reducen el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer y mejoran la salud mental, revela un estudio. Por no hablar de reducir el estrés mental y mantener un mayor nivel de endorfinas.
Mejora la visión.
Aunque tus ojos parezcan lo último que puedes conectar con tus piernas, caminar también es bueno para tu salud.
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