Falleció pacíficamente en su casa de Douchy, rodeado de sus tres hijos y su familia. Fue a reunirse con María entre las estrellas que tanto amaba en su corazón”, declararon conjuntamente en el documento. Loup y Liv, las dos hijas de Anthony Delon, también estuvieron presentes con su abuelo al que tanto querían y con el que habían pasado mucho tiempo en los últimos meses.
Alain Delon, que padecía un cáncer, un linfoma de evolución lenta, siempre había expresado el deseo de morir en el lugar que más amaba en el mundo: su casa de Douchy, en el Loiret. Y su deseo fue respetado. Pero este deseo no fue el único.
El guepardo también había pedido ser enterrado en su finca cerca de sus perros y se habían tomado medidas durante su vida. Este domingo 18 de agosto, el subprefecto de Loiret habló con la AFP para contar un poco más sobre la marcha de este último deseo de Alain Delon.
