Becky-Jo Allen quedó sorprendida al enterarse de que pronto sería madre de trillizos. Pero lo que realmente la impactó fue que los tres niños son absolutamente idénticos. Inicialmente, solo los vecinos y visitantes notaban la asombrosa semejanza. Sin embargo, una prueba de ADN lo confirmó: genéticamente, los tres niños son idénticos. Un caso así es extremadamente raro, ocurriendo solo una vez en 200 millones.
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